Las principales jornadas festivas se celebran entre el 14 y el 16 de agosto, en honor a la Asunción de la Virgen y a San Roque. Se subastan los banzos de las imágenes así como la retirada de sus mantos. Durante los días festivos, los mozos solían pedir anís y pastas a sus convecinos.
También se celebran otras fiestas, como San Bartolomé el 24 de agosto, con romería a su ermita y posterior merienda, con roscón elaborado para la ocasión, y la Virgen de las Aguas Cálidas, con la obligada subasta de banzos. La imagen de esta Virgen fue robada en 1994.
En la fiesta de la Concepción, en diciembre, se encendían hogueras. En la Pascua de Resurrección se colocaban aleluyas en las puertas donde habitaban las mozas casaderas.
Y ya, como costumbre fuera del ámbito religioso, se mantuvo hasta hace poco el pago del piso, que consiste en que cada forastero que cortejase a alguna moza del lugar debía pagar merienda a sus homólogos locales. También, y siguiendo con los casamientos, en las bodas se cantaban albadas:
tres cosas son menester:
memoria, entendimiento
y sabiduría también”