En Arancón donde se puede verse expuestos y conservados los más interesantes restos de la calzada romana que unía Uxama y Augustóbriga. Dos enormes miliarios se expone al visitante, muy cerca de la iglesia, en lugar habilitado para ello, con la leyenda delante de su ubicación e historia; hasta que ese espacio van a ser traslados otros tres enormes bloques de piedra, que pueden verse a escasos metros, detrás de la iglesia junta a una taina en ruinas. A la entrada del pueblo conservan una buena fuente de piedra sillería de la que se afirma su origen romano.